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Tienda Guerrilla

Del mismo modo que los centros comerciales buscan impregnarse de “cultura”, vemos una tendencia en los centros culturales a impregnarse de comercio, para de esta manera generar un sostenimiento de los mismos. En estas tiendas se ofertan productos de diseño, ropa, afiches, productos relacionados con grafiti, música, etc. Algunas veces estos productos son realizados por las mismas personas que frecuentan estos lugares.
Las barreras entre el fin y el medio , entre captar consumidores o captar diversidad cultural parecen diluirse, la sintonización de ideas a través de productos de uso común expresan diversas visiones generando lo que los antropólogos llaman cultura material.
Anteriormente los elementos de cultura material obedecían a procesos de intercambio que fortalecían los lazos entre las comunidades, esto se encontraba unido los distintos ciclos presentes en las vidas de los indígenas y tenía un sentido sagrado, este intercambio se realizaba utilizando los menhires, que son piedras gigantescas algunas talladas que servían para formarse una imagen del territorio y a su vez realizar lo que es llamado por An Roose la transmutación de la materia:
Esta cuestión de la donación y el intercambio, del pago, nos parece esencial, para comprender mejor a los uwas y para comprendernos mejor nosotros mismos, subyugados bajo otra deuda, con otra justicia y una crueldad distinta de la de los tunebos. El texto muestra el "intercambio silencioso" que practicaban estos indios: "Los lugares de intercambio de los clanes estaban señalados por un menhir o gran piedra labrada [...] En estos sitios, los uwa realizaban un intercambio en silencio. Los hombres de un clan colocaban sus productos, continuaban hacia el territorio del siguiente clan donde hacían lo mismo y, de regreso, recogían los bienes dejados a cambio; los productos que depositaban 'se convertían' en los que recogían [...] así, por ejemplo, las mochilas de fique y la cera elaboradas por clanes de tierras medias, 'se convertían' en yopo, perteneciente a grupos de tierras bajas o en sal, elemento de tierras altas" *
Aunque la verdad estamos bastante alejados de esta posibilidad de intercambio, propuestas como la de Sorpresa Caliente La marca de lo inesperado involucran el concepto de tienda guerrilla en la cual la tienda se convierte un evento:}
Cruzar la línea donde el piso habitual se convertía en algo diferente Y cuando cada uno daba su primer paso de ingreso, percibíamos en sus miradas la sensación de un territorio desconocido. Una vez ingresaban, sus rostros se encendían y todo se ponía en movimiento hacia ellos, haciéndolos parte de una experiencia habitual de la cual no somos muy conscientes al comprar. Al estar en nuestro espacio, entras en un escenario de autogestión performatica, en donde te haces parte de la marca con solo habitarla, conversamos, jugamos, hacemos malabares, dibujamos, bailamos, nos interesamos en recrear tu ideal de sorpresa caliente. **
De esta manera se comienzan a gestar experimentos sobre el intercambio comercial y el sostenimiento a través de eventos interculturales, dejando a un lado la visión negativa presente en la satanización de los espacios de consumo, se abren alternativas sobre actividades y espacios, conformando redes de sentido presentes en la ciudad y conformadas por sus propios habitantes. Los limites entre la ciudad real y la ciudad del deseo, La posibilidad de acceso a los mundos encantados de la ciudad nueva o entre el intercambio Uwa y la transmutación de la materia parecen diluirse en la acción performatica presentada por sorpresa caliente.
En los excluidos del sueño y la ciudad Blindada de Giadomenico Amendola, se plantean varios interrogantes sobre las dinámicas de consumo. Se afirma que quien está excluido del sueño puede constituir, en efecto un peligro para la existencia del sueño.
¿Quién es capaz de crear los sueños y vivirlos? y ¿Quien en cambio no lo es?
El éxito de estas iniciativas a nivel urbano parecen recaer en su capacidad de alcance, estarán seguras en cuanto mayor número de participación encuentren, generando así un mayor intercambio cultural, conformando redes de sentido y recuperando el verdadero sentido de la ciudad como medio de comunicación.

* http://www.lablaa.org/blaavirtual/publicacionesbanrep/boletin/bole69/bolet11a.htm
** Entrevista sorpresa caliente.


Vendera de carne, fuente: EL MERCADO DE LA PLAZA MAYOR DE SANTAFE EN EL SIGLO XIX VISTO POR LOS VIAJEROS. Tomado del libro “De la sala al comedor” de Cecilia Restrepo y Helena .

La informalidad como patrimonio urbano latinoamericano